La efectiva implementación de la Responsabilidad Social Universitaria requiere una categorización de las estrategias y proyectos con impacto en la RSU, considerando diversos ámbitos que abarquen la totalidad del compromiso institucional. El programa de Responsabilidad Social Universitaria propone clasificarlas en cinco impactos: formativo, cognitivo, social, organizacional y ambiental.
Se pretende integrar la RSU en los programas educativos, cultivando competencias sociales en los estudiantes y que se cumpla con un perfil de egreso que les permita resolver problemas sociales, económicos y ambientales en el contexto que los rodea.
Implica la generación y difusión del conocimiento, promoviendo la investigación y la reflexión crítica, al mismo tiempo que tenga un sentido útil para la sociedad, permitiéndoles generar estrategias para alcanzar el desarrollo sostenible a partir de los conocimientos generados en la universidad.
Se enfatiza la vinculación y participación activa de la universidad con la comunidad, buscando impactar positivamente en su desarrollo. Esto puede verse reflejado a través de las prácticas profesionales, la vinculación de las asignaturas con la sociedad, la participación en proyectos a beneficio de la sociedad, así como la construcción de puentes con organizaciones de la sociedad civil y empresas, colaborando de manera conjunta para el desarrollo sostenible en la comunidad.
Este sugiere la implementación de prácticas internas que reflejen la RSU, fomentando una gestión transparente y ética. Al mismo tiempo, el impacto positivo en este ámbito, está relacionado con el fomento de la cultura de la paz, la inclusión, el respeto a los derechos humanos y la promoción de un clima organizacional saludable.
Destaca la importancia de medidas que reduzcan el impacto ecológico de las operaciones universitarias, la promoción del reciclaje, la gestión de residuos, campañas de reforestación y limpieza, producción de energías limpias, así como la educación ambiental.